Cómo crear una empresa en España en 2025: guía definitiva paso a paso

Para crear una empresa en España de forma segura, rápida, sencilla y que cumpla con todos los requisitos necesarios, como el plan empresarial, la elección de la forma jurídica, la inscripción en el Registro Mercantil, la apertura de la cuenta de empresa y muchos otros pasos que son necesarios para que tu empresa quede legalmente constituida.

España ofrece diferentes ayudas y beneficios para la creación de nuevas empresas y emprendimientos, esto es algo que se debe tener en cuenta a la hora de crear una nueva empresa y que te lo contaremos más adelante.

Desde Yousing hemos creado una guía paso a paso de todo lo que debes tener en cuenta para que el proceso de creación de tu empresa sea sencillo, rápido y evites traspiés y complejidades que retrasen el proceso.

Para crear una empresa en España es necesario empezar por aspectos esenciales, que aunque parezcan obvios, te ayudarán a tener claro todo lo que necesitas para la constitución de la empresa.

Estos primeros pasos te ayudarán a entender cada una de las necesidades para tu negocio a corto, mediano y largo plazo, ya que con esto podrás determinar el tipo de empresa y sus características para arrancar de forma segura.

El punto de partida para la creación de una empresa es saber si la idea que tienes es viable, tiene un mercado y si ese mercado es realmente rentable.

En este punto debes ser claro, coherente y realista, ya que de ello dependerá el éxito de tu empresa.

Antes de lanzarte a crear una empresa es importante tener claro en dónde te estás metiendo, es decir, conocer el mercado en el que vasa competir, la competencia que exista en el momento de lanzar tu marca.

El análisis del mercado consiste, básicamente, en saber quiénes son tus clientes potenciales, qué haces por ellos, que problema o necesidad les resuelves y por qué te pagarían por lo que les ofreces.

En cuanto al análisis de la competencia, es saber con claridad quién vende lo mismo que tú vas a vender, qué tienes para ofrecer que te diferencie de los que ya están resolviendo la misma necesidad, cuáles son sus precios, sus ventajas y desventajas en el mercado.

Vamos, que tienes que saberlo todo sobre tu cliente potencial y sobre tu competencia potencial.

Esto tiene que ver con el dinero, el que tienes, el que vas a gastar y el que esperas conseguir.

La evaluación financiera es una revisión concienzuda de los números para conocer el capital con el que cuentas para invertir en tu empresa, tanto para el punto de partida como para el mantenimiento a corto y mediano plazo.

Proyectar la empresa en aspectos como  los gastos que tendrá, los ingresos que espera obtener y los beneficios que generará.

Con este punto claro podrás conocer, entre otros, el tipo de empresa que debes crear, los beneficios y ayudas a los que podrás acceder.

Todo proyecto empresarial debe tener una ruta establecida a corto y mediano plazo para lograr penetrar en el mercado y ser rentable.

Esta ruta se conoce como plan de empresarial o plan de negocio y contiene en detalle los diferentes pasos que la empresa dará desde su creación, en el corto y mediano plazo y como se proyecta a largo plazo, en el futuro.

El plan de negocios es la carta de presentación que permitirá conocer en detalle todos los aspectos de como funcionará la empresa, es una guía para que el empresario tenga clara la ruta de su negocio y también para que inversores y stakeholders tengan claridad a la hora de vincularse con tu negocio.

El plan de negocios debe incluir algunos aspectos claves para que haya claridad sobre el tipo de empresa, su funcionamiento, rentabilidad y proyección en el mercado.

1. Descripción de la empresa, este debe contar qué hace la empresa, qué productos o servicios ofrece, en qué mercado. Además, su misión, visión y objetivos.
2. Análisis del mercado, como te decíamos unas líneas atrás, el análisis del marcado consiste en saber a quién ofreces tus servicios o productos y con quién compites.
3. Organización y gestión, quien estará detrás de la empresa y quien se encargará de cada uno de los aspectos clave de la misma, vamos tu equipo o tus socios.
4. Productos o servicios, qué ofreces, es importante definir con claridad lo que vas a ofrecer al mercado, especialmente cuando se trata de servicios, define con claridad que hace única tu oferta y cómo llegarás a tu cliente ideal.
5. Presupuesto, cuánto dinero vas a invertir en la creación de la empresa y como se distribuirá dicha inversión a lo largo del tiempo.
6. Plan operativo, cómo será el día a día de tu empresa, qué se hará, cómo se hará y quienes intervendrán en dicho proceso.
7. Estrategia de marketing y ventas, cada uno de los pasos y canales que se realizarán para llegar al cliente ideal, en los diferentes momentos del embudo de compra del cliente.
8. Viabilidad financiera, enseña los números, los que hay y los que se espera que haya en el futuro. Cuanto gastarás en ponerla en marcha, en mantenerla y cuánto esperas ingresar en diferentes periodos de tiempo.

Con estos pasos claros tendrás una idea bien definida de la empresa que vas a crear, sus posibilidades en el mercado y la forma jurídica adecuada.

En España hay seis diferentes formas jurídicas para crear un negocio y se ajustan a las diferentes necesidades de cada tipo de empresa, desde las unipersonales hasta los grandes conglomerados económicos.

Cuando ya tengas claro que tipo de empresa quieres iniciar podrás definir la forma jurídica que más se ajusta a las necesidades de tu negocio.

Las formas jurídicas de empresas en España buscan ajustarse a cada tipo de negocio y de esta manera ayudar al tejido empresarial a tener una estructura que se ajuste a sus necesidades.

Esta forma jurídica es la más común en España para pequeñas y medianas empresas, consiste en que los socios de la empresa son responsables solo del capital que se invierte en esta, con lo que se protege el patrimonio personal de cada uno de ellos. Requiere un capital mínimo de 1 euro para su creación.

Es la forma que usan grandes empresas en donde su capital se divide en acciones, que se pueden vender o comprar, aportado por los socios. Los socios no son responsables de las deudas sociales de la empresa. Para la creación de este tipo de empresas es necesario un capital mínimo de 60.000 €.

Es la forma más sencilla para personas que trabajan por cuenta propia, ya sea vendiendo productos de manufactura propia, servicios profesionales o pequeños negocios como una cafetería. En este caso, cada autónomo es responsable de las deudas que se generen por el negocio.

Esta forma jurídica indica que todos los participantes de la sociedad están vinculados de manera activa en ella y comparten tanto la aportación como los beneficios de la misma, es una forma que se usa regularmente en el sector agrícola de pequeños productores.

Esta variante de la SL tiene como fin facilitar el proceso de creación de empresa, acelerando de forma telemática todo el proceso para conseguirlo en 48 horas. Requiere de un capital entre 3.000 € y 120.000 €.

Ahora que ya tienes tu forma jurídica puedes ir al siguiente paso que consiste en conseguir el Certificado de Denominación social.

El Certificado de Denominación social es el que asegura que el nombre que has elegido para tu empresa es único y no lo está utilizando nadie más.

En este paso hay que tener en cuenta que existen muchas posibilidades de que tu nombre esté ya en el mercado, por ello debes hacer un trabajo exhaustivo de búsqueda para no llevarte sorpresas.

Paso 1: Solicitud a través del Registro Mercantil Central

• Este paso se puede realizar de forma online en el sitio web del Registro Mercantil Central, siguiendo todos los pasos que se indican en la web y tiene un costo aproximado de 16 €.

Paso 2: Recibe tu Certificación Negativa

• Es el documento que emite el Registro Mercantil Central y que confirma que el nombre que has elegido para tu empresa no está siendo usado por  otra empresa.

Abrir una cuenta bancaria es un requisito importante para constituir la empresa, ya que es allí en donde se aporta el capital social de la misma, además será en donde se realicen los diferentes movimientos financieros de la misma. Una vez abierta y aportado el capital financiero.

El banco deberá emitir un certificado bancario con el que podrás firmar ante el notario la escritura de constitución de tu empresa.

Es el momento de formalizar la constitución de tu empresa mediante una escritura pública ante notario, es momento que se hace oficial la existencia de tu empresa y a partir de ahí  empieza a tener obligaciones, fiscales y jurídicas. 

Este documento debe incluir información de tallada de los socios y administradores de la empresa, nombres, apellidos, documento de identidad, dirección, etc.

Además, debe contener los estatutos y reglas de funcionamiento de la empresa nivel interno. También debe detallar la información del capital social, lo que aporta cada socio en la constitución de la empresa.

El NIF provisional se debe solicitar antes de iniciar cualquier actividad comercial y está vinculado fiscalmente con tu empresa.

El Número de Identificación Fiscal Provisional permite operar legalmente hasta que se obtenga el NIF definitivo, para su solicitud son necesarios la escritura de constitución, el DNI de los socios y el certificado de denominación.

Este trámite se puede hacer de forma presencial en Hacienda u online a través de su página web, para ello debe contar con tu certificado digital.

El siguiente paso, cuando ya has formalizado la escritura pública, es registrar tu empresa en el registro Mercantil para poder operar legalmente.

Para inscribir tu empresa, necesitas reunir los documentos, escritura de constitución, certificación negativa y DNI de los socios. Ir al Registro Mercantil, entregar la documentación, pagar la tasa y esperar un poco. 

¡Y ya está! Tu empresa estará oficialmente registrada.

Después de inscribir tu empresa ya puedes solicitar el NIF definitivo, presentando el modelo 036 o 037 junto con el DNI de los representantes legales en la Agencia Tributaria.

El NIF definitivo será el número de identificación fiscal que esté vinculado a todas las operaciones que realice tu empresa, a todas las obligaciones tributarias y jurídicas.

llegados hasta este punto es el momento de darte de alta tanto en la Agencia Tributaria como en la Seguridad Social.

Para realizar el registro en IAE debes presentar el Modelo 804 en la Agencia Tributaria, indicando la o las actividades a realizar. En caso de que tu empresa tenga un volumen de negocio inferior a 1 millón de euros, debes marcar la casilla correspondiente para quedar exento de dicho impuesto.

Se deben registrar y dar de alta en la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS), a todos los socios y empleados que trabajen en la empresa, mediante el Modelo TA.2 para los socios y TA.1 para los empleados. 

El gobierno español y los gobiernos autonómicos ofrecen diferentes tipos de ayudas y subvenciones para emprendedores y la creación de nuevas empresas.

Identifica si tu empresa se ajusta a alguno de los perfiles que recibe dichas ayudas e incentivos fiscales para postularte y con ello obtener la ayuda económica que pueda ayudar al crecimiento de tu empresa.

La creación de una empresa en España puede ser un poco engorrosa a nivel burocrático, por eso es importante tener claro todos los pasos necesarios y de esta forma conseguir que todos los trámites a realizar sean rápidos y evites congestiones innecesarias.

Con este paso a paso que hemos elaborado en Yousing podrás guiarte para planificar todo el proceso y conseguir crear tu empresa de forma rápida y sencilla.